Durante años guarde las cucharitas de té o café hacia la izquierda. La forma del portacubiertos en el cajón de la cocina hacías mas cómodo que fuera así.
Luego me mudé y las cucharitas quedaron hacia la derecha. En esos días se votaba y resultó que cambiamos de gobierno. Me llamó la atención, que cada vez que las cucharitas (o alguna sola) miraba de nuevo hacia la izquierda, había algún evento que dejaba mal parado al nuevo gobierno. Obviamente, empecé a mantenerlas todas hacia un lado.
Luego vinieron las elecciones de medio término y empecé a poner los cubiertos del fondo hacia adelante en en lavavajillas. Las encuestas hasta ahí venía muy mal para el gobierno, y empezaron a dudar si el resultado sería o no favorable. El día de las elecciones, los cubiertos estaban colocados de atrás para adelante. Y el gobierno ganó las elecciones, o la menos, no perdió.
Creo que pocos saben que en mi cocina se deciden las elecciones del país.
Somos palabras
jueves, 17 de agosto de 2017
jueves, 18 de mayo de 2017
2 fotos
22 de junio de 2013
8 de julio de 2013
Uno publica casi compulsivamente las cosas que uno vive en Facebook, Instagram hasta en Twitter.
Pero hay imágenes que llevamos (que llevo) ocultas en mi celular. Son fotos que nos recuerdan momentos felices, que no fueron.
Fotos felices. Fotos tristes. Todo en una.
miércoles, 26 de octubre de 2016
miércoles, 19 de octubre de 2016
martes, 24 de mayo de 2016
Perder embarazos duele
La perdida de un ser que existe, o existió, es lo habitual. El duelo por ese ser que perdimos, también es habitual. Nadie cuestiona a quién sufre a un ser querido y lo exhibe, lo demuestra.
Es por eso que hubiera querido que nacieras... tenerte en mis brazos, nombrarte, mirarte a los ojos.
Perder embarazos duele... y tal vez, como única expresión de la paternidad, haberte visto solo a través de una ecografía, que el único sonido que te recuerde haya sido el artificial latido de tu corazón...
Duele, pero pocos entienden que tal vez sea lo mismo.
martes, 10 de mayo de 2016
Sexista...
Cuando vi estas tazas y platos, no dudé ni un segundo en comprarlas: eran rosas y celestes.
En un sentido práctico, solucionaban el tema de como identificar las tazas en el desayuno: la celeste era mía, la rosa de mi esposa... nunca había encontrado un juego de tazas tan práctico!
Y de pronto, en casa, para los mas jóvenes, resultó una idea antigua, anticuada, estigmatizadora y hasta sexista.
Desde entonces, ya no elijo las tazas o platos celestes. Dejo que el azar me estigmatice a su gusto.
martes, 23 de febrero de 2016
Rutina
Me despertó mamá cuando se iba a trabajar y pensé en vos, como anoche, antes de dormir. Cando se fue, abracé a los perritos e intenté dormir.
Mas tarde, me levanté y leí el diario. Las noticias no me distraen... Desayuné y preparé las tostadas con queso light para los perritos, como todos los días. Mis mañanas también son preparando el desayuno para otros, no hubiera sido mucho trabajo.
Y antes de salir al trabajo, también tuve mi rutina: dejar todo organizado para ellos.
No me hubieras cambiado las mañanas, ni las noches. Es más, creo que se hubieran parecido mucho a estas.
Y abrí el portón, saqué auto pensándote. También te hubiera llevado en estas cosas tan ínfimas conmigo.Vine al trabajo y por momentos te pensé en las autopistas... y entre las cotizaciones a clientes y entre tantas otras cosas rutinarias.
Y al volver a casa y saludar a mamá... y al sentarme con los perritos a mirar la tele, en las cenas... en el jardín... cada cosa en casa tiene algo de vos. Nos mudamos por vos: mamá se puso hermosa (me di cuenta antes que vendrías, porque todos la miraban a punto de ponerme celoso... y yo que normalmente no tengo celos!), queríamos que tuvieras mas lugar en esta casa... un jardín donde correr, donde crecer. Perritos para que crecieran con vos...
Por eso no entiendo por qué, así de golpe, tu corazón se detuvo. Que no tengas un nombre, es incomprensible.
Tal vez, algún día entienda por qué...
Mas tarde, me levanté y leí el diario. Las noticias no me distraen... Desayuné y preparé las tostadas con queso light para los perritos, como todos los días. Mis mañanas también son preparando el desayuno para otros, no hubiera sido mucho trabajo.
Y antes de salir al trabajo, también tuve mi rutina: dejar todo organizado para ellos.
No me hubieras cambiado las mañanas, ni las noches. Es más, creo que se hubieran parecido mucho a estas.
Y abrí el portón, saqué auto pensándote. También te hubiera llevado en estas cosas tan ínfimas conmigo.Vine al trabajo y por momentos te pensé en las autopistas... y entre las cotizaciones a clientes y entre tantas otras cosas rutinarias.
Y al volver a casa y saludar a mamá... y al sentarme con los perritos a mirar la tele, en las cenas... en el jardín... cada cosa en casa tiene algo de vos. Nos mudamos por vos: mamá se puso hermosa (me di cuenta antes que vendrías, porque todos la miraban a punto de ponerme celoso... y yo que normalmente no tengo celos!), queríamos que tuvieras mas lugar en esta casa... un jardín donde correr, donde crecer. Perritos para que crecieran con vos...
Por eso no entiendo por qué, así de golpe, tu corazón se detuvo. Que no tengas un nombre, es incomprensible.
Tal vez, algún día entienda por qué...
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